Durante esta semana se reunió la comunidad de Educadores y Funcionarios de nuestro Colegio a reflexionar sobre el tiempo de Cuaresma como un tiempo que nos da la oportunidad para cultivar nuestro corazón, para crecer en el amor. Como agricultores, sembramos una semilla, asemejando las prácticas de la Cuaresma a cada uno de los elementos de un cultivo. Por medio de trabajo en grupos pequeños, bajo los árboles, se generó un ambiente de conversación y comunidad muy enriquecedor.
Nos comparte su testimonio Priscila Jasmine Magna M.: “La jornada me invito a darme cuenta que el amor de Dios esta siempre presente para uno, en todo, incluso en lo que no me gusta, lo hago con alegría. Hoy desperté más alegre, con más energía y con ganas de sonreír”.